CONSEJOS PARA EL VERANO
Ya nos estamos preparando para el verano, sino que se lo digan a este calor que tanto aprieta… Solicitamos los días de vacaciones que queremos, nos ponemos de acuerdo con nuestros compañeros y por fin, llegó el día que estamos seleccionando la ropa, gadgets y demás artilugios que llevaremos en la maleta (consejos para hacer la maleta), ¿verdad?
Empecemos por lo primero de todo, en estas fechas, somos muchos los viajeros que decidimos emprender una nueva aventura y entonces, llega el momento en el que llegamos al aeropuerto y está medio país en la misma situación que nosotros, largas colas para la facturación, el embarque, la impresión de billetes. En estos casos, lo mejor es ser previsor y organizar todo antes de que llegue el día que tenemos que salir de viaje. Es decir, haz check-in en casa, imprime los billetes y la espera seguro es más amena. No obstante, alguna vez puede surgir algún inconveniente o retraso, pero no desesperéis, sigamos paso por paso las indicaciones que nos proporciona, por ejemplo en España, AENA sobre los derechos del pasajero, por lo que siempre podemos reclamar según la circunstancia que hayan infringido como viajero. Como las causas pueden ser diferentes y la indemnización varía según el problema, las horas de retraso, la distancia, etc, podéis calcular vuestra indemnización para saber cuánto os corresponde y poder reclamar adecuadamente ante la aerolínea.
| 10 TRUCOS PARA HACER LA MALETA |
Ya ha empezado el verano y mucha gente ya ha puesto rumbo a su destino de vacaciones, pero otros muchos no, así que hemos querido elaborar un listado de diez trucos para hacer la maleta ahorrando el máximo espacio posible, pero manteniendo el orden y llegando a nuestro destino como un pincel.
Doblar ropa delicada: A la hora de hacer la maleta, nos surgen siempre las mismas dudas con la ropa delicada o ropa que se arruga con bastante facilidad. Un truco que siempre funciona, es poner una capa de papel pinocho entre cada prenda y en el doblez de la prenda más sensible a arrugarse.
Toallita secadora: Si tenéis secadora sabréis que estas toallitas se utilizan para la electricidad estática entre prendas y dejan un buen olor en las prendas. Pues bien, si vais a realizar un viaje largo, es un buen truco para la maleta. Dejáis una entre la ropa y cuando lleguéis al destino, olerá como recién salida de la lavadora.
Joyas: Utilizad las cajas para organizar las pastillas como joyero, si vais a llevar pulseras o pendientes para todas las vacaciones. De esta manera, no se enredarán ni se perderán en la maleta o cualquier bolsa que utilicéis.
Gorros de baño: Otra utilidad para los gorros de baño, son para los zapatos, así no nos preocupamos de ensuciar el resto de la maleta ni de la ropa, bien organizado y ocupando poco espacio.
Cinturones: Nos servirá para no arrugar el cuello de las camisas ni tampoco deformarlo, así cuando lleguemos a nuestro destino, estará como nueva y no tendremos que preocuparnos de volver a plancharla.
Botes: Quien no ha cometido el fallo de meter un bote empezado de gel, colonia o crema en una maleta y cuando hemos llegado estaba derramado… Pues con este truco no nos volverá a pasar, ya que el plástico impide que el contenido se vierta.
Ropa enrollada: Este es el mejor truco y uno de los más antiguos, la ropa enrollada se arruga según dicen menos y ocupa menos espacio, así que si vais a llevar mucha ropa, ya sabéis que tenéis que hacer.
Cuchilla: Si lleváis cuchilla para afeitar sin protector, una solución, es ponerle un clip de folios en el cabezal, así no os llevaréis un susto ni os cortaréis al utilizarla.
Cargador: Alguna vez te has ido con el cable para cargar tu smartphone o tablet, pero se te ha olvidado el enchufe… No te preocupes, fíjate en la televisión de la habitación de tu hotel, todas tienen USB, así que ¡Salvados!
Agua: Este truco nos sirve si vamos al aeropuerto, ya que estamos hartos de llegar y tener que tirar nuestra botella de agua ¿verdad? Pues es muy fácil, vacíala o bébetela y la podrás conservar, así una vez pasado el control de seguridad, sólo tienes que ir a los servicios o a las fuentes habilitadas en las terminales y rellenarla.
| 5 CONSEJOS PARA ORGANIZAR LAS VACACIONES DE VERANO |
1) Presupuesto
Salvo que tengas un bolsillo muy amplio, el presupuesto del que dispongas limitará las posibilidades. Pero sólo eso: limitar. No quiere decir que con poco dinero no se pueda disfrutar, ni descubrir rincones nuevos, ni realizar un gran viaje.
Siendo muy responsable, puedes definir el importe que puedes llegar a gastar en todo el viaje. Ten en cuenta tanto los servicios que requieren un gasto previo a la salida (reserva de transporte, alojamiento, excursiones), como los gastos en destino (comidas, salidas, transporte local, entradas, actividades, etc.)
2) Destino
Una vez definido el punto 1) podrás pintar el mapa de tus posibilidades. Aquí hay que ser muy creativo ya que algunos destinos tienen más de una opción para vivirlos, y algunas puede que entren en tu presupuesto. Digamos, por ejemplo, que quieres ir a Canarias y se te va un gasto elevado en billetes de avión. Pues para no resignar el destino deseado puedes optar por elegir un alquiler de casas, couchsurfing o un camping para bajar el costo del alojamiento.
Por otro lado, y dentro de la negociación siempre presente cuando viajas con adolescentes, la definición del dónde estará marcada por sus intereses, por la asistencia a un concierto, por un encuentro con sus amigos, o por cualquier otro interés de tus hijos.
Tú puedes desear tirarte en una playa de Menorca sin mover un dedo durante tus vacaciones, pero es probable que termines caminando por las calles cool de Londres o París siguiendo los pasos de tus hijos. ¡Y así debe ser! Que el tiempo pasa muy rápido y nunca sabrás cuál es el último viaje “en familia” con tus ya-no-peques.
3) Servicios
Ya lo comentamos recién, un destino puede conocerse de muchas maneras, y alguna puede que quepa en tu presupuesto. Para ello, habrá que sacar cuentas y sentarse a husmear entre todas las opciones de servicios turísticos que tenemos a nuestra disposición. Trenes, buses, ferries, aviones, o en coche. Armaremos una ruta aproximada de los puntos que queremos tocar, o de los lugares a visitar si vamos hacia una ciudad.
A partir de allí, y teniendo en cuenta los intereses de todos los integrantes del grupo, podremos ver qué tipo de servicios requerimos.
Hago aquí un aparte para sugerir que no nos olvidemos de uno imprescindible. Viajes solo o acompañado, cerca o lejos, siempre ten en cuenta la seguridad y la salud. Para ello, revisa la cobertura de tu seguro de salud local, o consulta si tu tarjeta de crédito incluye cobertura de este tipo en el destino escogido. O contrata uno. No es un gasto, es una inversión en tranquilidad y asistencia. Y ojalá que no tengas que comprobarlo.
Después quedará la decisión personal de tomar excursiones organizadas o ir a tu aire. Hay para todos los gustos y necesidades. Quienes no se atreven mucho solos por el mundo, agradecerán tener las cosas más o menos organizadas, y quienes deseen la mayor libertad del mundo.
Reconozco que tengo un poco de ambos (y creo que somos unos cuantos). En ocasiones cuando viajo a un destino absolutamente desconocido, agradezco un traslado a la llegada, o una visita de la ciudad guiada para poder ubicarme, aunque el resto del tiempo la camine por mi cuenta.
Algo similar ocurre con los hoteles. Me siento más segura cuando los llevo contratados desde casa, e incluso puedo aprovechar el tiempo para elegir con paciencia lo que mejor va con mis gustos y los de mi familia, y hasta servirme de las ofertas por reserva anticipada o las promociones que puedan incluir algún servicio extra por reservar con antelación (el desayuno gratis, o el parking o el acceso al spa).
4) Equipaje y en viaje
Aquí el tema es muy sencillo. Ya no tienes que cargar con el equipaje de tus niños pequeños. Son adolescentes y ellos saben muy bien lo que quieren vestir… pues se hacen su propia maleta y se ocupan de llevarla. Así también asumen la responsabilidad de buscarse la vida si se olvidan algo en casa. ¿Llevan sólo dos camisetas para 10 días? No te preocupes, ya habrá solución.
Olvídate de hacerte responsable de esas pequeñas cosas. Ellos “son grandes”. Y la verdad, es que poco importa si se dejaron las chanclas de la playa en casa. Por otro lado, disfrutarás de la libertad de movimientos ya que, en mi caso, sólo llevamos una maleta pequeña (de cabina) por persona para viajar en verano.
Y en cuanto al tiempo en viaje, tenemos un estilo muy simple: nada de superficialidades. Vestimos cómodas y frescas, repetimos vestuario, lavamos sobre la marcha, si nos tentamos igual nos compramos alguna cosita, pero no nos cargamos de regalos, ni souvenirs. Cada una de nosotras tiene un límite: lo que entre en SU maleta pequeña.
5) Desconexión
Este tal vez sea el mejor consejo. Aprovecha la organización de tus vacaciones de verano para desconectar del día a día. Que no sea un “trabajo” ni te cargue de más estrés del que ya llevas acumulando. Disfruta la planificación, juega con las posibilidades, diviértete con la familia imaginando itinerarios, aprende de los intereses de cada uno, escúchalos para enriquecer el viaje. Anticipa la experiencia. Vívela aún antes de salir rumbo al aeropuerto.
Y una vez en destino, sólo disfruta.
| 5 CONSEJOS PARA VIAJAR SEGUROS ÉSTE VERANO |
Con la llegada del verano, el incremento del número de desplazamientos al extranjero y la dificultad que, en ocasiones, encuentran los viajeros para preparar su cobertura sanitaria durante el viaje, recordamos los principales aspectos a tener en cuenta para viajar de forma segura durante el verano.
Para planificar la salud de un viaje al extranjero, es imprescindible informarse bien sobre todo lo necesario para mantenerse sano durante el trayecto. Por eso, se recomienda consultar con un centro de medicina del viajero o de vacunación internacional, al menos un mes antes de salir de viaje.
También es importante contar con un seguro médico que contemple las necesidades médicas de cada viajero y que ofrezca una atención especializada para prevenir enfermedades y evitar riesgos.
1. Consulta Médica previa al viaje. Según estudios recientes, en Europa en torno al 30-40% de viajeros no solicitan consejo sanitario antes del viaje. En España, tan sólo lo hace el 50%. En caso de viajar al extranjero es importante cuidar la salud, conociendo las posibles enfermedades e infecciones potenciales del destino al que se viaje. Por eso, es importante informarse bien y hacer una evaluación de posibles riesgos con un plan de prevención sanitaria.
El estudio médico pre-viaje incluye, entre otros aspectos: evaluación de la condición física y psicológica del viajero, así como su historial de inmunizaciones, análisis de los riesgos de salud reales relacionadas con el destino, el tipo y la duración del viaje, buenas prácticas de comportamiento en destino, automanejo de condiciones médicas y búsqueda de asistencia sanitaria local, evaluación de otras enfermedades relacionadas con el agua, los alimentos y transmitidas por vectores (mosquitos y otros animales).
2. Conocer la vacunación específica para el destino y su área de riesgo. Los especialistas recomiendan preparase antes de un viaje y esto incluye informarse sobre las vacunas que necesitas para viajar a tu destino: qué vacunas son obligatorias, cuáles recomendadas, los tratamientos de prevención de enfermedades como la malaria y la actualización de las vacunas rutinarias. Debemos recordar que, en función de las actividades de riesgo previstas durante el viaje, habrá que seguir unas recomendaciones específicas en cuanto a vacunación.
3. Viajar con un seguro médico. Dado que los gastos de hospitalización y tratamiento médico en la mayor parte de los países han de ser asumidos por el paciente y pueden llegar a ser muy elevados, se recomienda contratar un seguro médico que tenga plena cobertura en caso de enfermedad o accidente durante el viaje, incluida cobertura de gastos médicos en el extranjero y traslado sanitario.
4. Informarse sobre cómo viajar con medicamentos. Si el viajero padece alguna enfermedad crónica, debe llevar la medicación necesaria para su viaje por lo que deberá informarse de los requerimientos para poder viajar con ellos. Es necesario consultar al médico y asegurarse de que se tienen las recetas y certificados necesarios para llevar los medicamentos durante los desplazamientos.
5. Chequeo post-viaje. Después de un viaje internacional, dependiendo del destino, es aconsejable realizar una consulta médica en la que los profesionales médicos darán respuesta a las inquietudes en temas de salud. Esta consulta es especialmente necesaria en aquellos viajeros que están diagnosticados de alguna enfermedad crónica, que sufren de algún tipo de inmunosupresión y que desarrollan algún tipo de síntoma dentro de los 3 meses posteriores a su regreso del viaje.